viernes, 5 de enero de 2018

7 casos en los que conviene instalar el emprendimiento en un coworking

El nombre proviene del inglés y remite a la expresión trabajo colaborativo. Sin embargo, en el universo de los emprendedores y freelancers coworking se transformó en mucho más. En pleno auge en Argentina, se trata de una tendencia en ascenso, tanto en Buenos Aires como en las principales ciudades del resto del país. Son espacios de usos múltiples que se rentan, en diferentes formatos de contratación, para realizar tareas de trabajo o de estudio con acceso a servicios compartidos. Las instalaciones suelen estar abiertas y , para algunos profesionales o productores independientes, los beneficios son muchos.

Los coworking cuentan con prestaciones pensadas para que sus ocupantes no necesiten nada que allí no encuentren: Conexión wifi, cafetería y agua, impresoras, mobiliario comodidades para recibir visitas, luz natural, abundante acceso a tomacorrientes, buzón para correspondencia y una extensa franja horaria de libre acceso. Pero además, hay un ingrediente extra que a muchos les resulta muy atractivo. Se trata de la posibilidad de intercambio con otros que se encuentran en su misma situación. Muchas alianzas estratégicas e ideas colaborativas surgen en sitios de trabajo compartido en un espacio en común. 

En la edición de #HaceloPosible de hoy brindaremos nuestros consejos profesionales al respecto. A continuación 7 casos en los cuales conviene recurrir a un sitio de coworking para desarrollar un emprendimiento:

1 - Mínimo de 5 reuniones semanales 

Ya sea entre miembros del equipo o con agentes externos, a menos que se cuente con una oficina en el hogar, los costos de un coworking en contraposición a locales de gastronomía no dejan margen a la duda. De hecho, los presupuestos de estos espacios están diseñados con este criterio. Si se hace el cruce de variables entre costos y beneficios para acceder a un sitio de reuniones fijo y de libre acceso, entonces muy rápido se llegará a la conclusión que es muy conveniente.



2 - El emprendimiento incluye 3 socios o más

Con los gastos de mantenimiento del coworking compartido entre 3 o más personas resulta muy razonable recurrir a este beneficio. Y se lo puede considerar de esta manera si se tiene en cuenta que se trata de un punto de encuentro seguro, flexible y con las comodidades necesarias para producir más y mejor. Además del proyecto en conjunto, los integrantes podrán desempeñar otras actividades personales.

3 - Necesidad de intercambio 

Algunas personalidades necesitan, para producir de modo eficiente, estar en contacto con otros. Quienes no se lleven bien con la soledad encontrarán en el coworking una solución ideal. Son, sin dudas, espacios muy nutritivos para el surgimiento y desarrollo de ideas colaborativas. Incluso grandes relaciones personales puede aparecen con esta opción.

4 - Imposibilidad de cumplir una rutina doméstica 

Una razón muy común es el caos en el hogar. Ya sea por familia numerosa o por falta de auto disciplina, muchos freelancers necesitan salir de la casa para poder producir de modo eficiente. Esta opción es económica, accesible y amigable para estos casos. También quienes tengan su domicilio en instancias de obras y refacciones. Salir en búsqueda de un coworking es de gran ayuda para poder sostener el ritmo laboral


5  - Imagen corporativa antes clientes

Hay emprendimientos que requieren una impronta ante los posibles futuros o actuales clientes. En estos casos, poder ofrecer un domicilio comercial para entrega de correspondencia, o contar con una sala de reuniones permanente, significa una solución. Quienes deban reforzar su imagen de empresa encontraran en el coworking un opción de muy bajo costo con todos los recursos necesarios. En esta situación, es más una inversión que un costo fijo.

6 - Crisis de creatividad 

Suena disparatado pero no lo es. Si la tarea que se realiza en el emprendimiento requiere originalidad e imaginación puede suceder que el creativo se encuentre estancado en el proceso de producción. A veces estas crisis se resuelven con un cambio de espacio físico, un salto en la rutina o con la incorporación de estímulos externos. Probar un tiempo con la opción coworking puede destrabar una meseta que frena el flujo de ideas.

7 - Incompatibilidad de horarios

Muchas veces los freelancers o emprendedores tienen una agenda de actividades y trabajo que va muy a contramano de su entorno familiar o domestico. En estos casos la rutina se convierte en una trampa y se vuelven muy complicados tanto convivencia como rendimiento laboral. Salir a trabajar fuera de casa en un contexto independiente, en pleno auge de los coworking, es una opción muy económica y accesible para quienes atraviesan estas dificultades.

Fenanda Santágata

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